HIRO angled blush brush 1.40
Brocha vegana en ángulo para colorete o bronceador en polvo (1 ud)
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24,95 €
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Esta brocha en ángulo se ha diseñado especialmente para que sea tu aliada al aplicar productos en polvo en tus mejillas, ya que por su forma se adapta perfectamente a ellas. Úsala para aplicar el bronceador o el colorete, desde los acabados más intensos a los más suaves, ella te ayudará para que el proceso sea sencillo y el resultado, el perfecto.
Descripción del producto
Esta brocha en ángulo se ha diseñado especialmente para que sea tu aliada al aplicar productos en polvo en tus mejillas, ya que por su forma se adapta perfectamente a ellas. Úsala para aplicar el bronceador o el colorete, desde los acabados más intensos a los más suaves, ella te ayudará para que el proceso sea sencillo y el resultado, el perfecto.
Todas las brochas de HIRO se realizan en Alemania con fibras veganas ultra-suaves de la máxima calidad.
Medidas: 18 cm x 3,4 cm
¿Cómo usarla?
Para el colorete:
- Coge el colorete con la brocha, elimina el exceso de pigmento dándola un golpecito y aplícalo en el rostro, desde “las manzanas” de las mejillas hacia las sienes.
Para el bronceador:
- Coge el bronceador con la brocha, elimina el exceso de pigmento dándola un golpecito y aplícalo en el rostro, en las zonas donde normalmente incide el sol.
Cuidado y mantenimiento
- Una correcta higiene de las brochas te ayudará a mantenerlas intactas durante mucho tiempo. La frecuencia de lavado dependerá, lógicamente, del uso que le des. Si la usas a diario, al menos deberías lavarla una vez a la semana, o cada diez días, pues las brochas pueden acumular suciedad y bacterias que extendemos por el rostro si no cuidamos su limpieza. Si se trata de una brocha para productos líquidos, como maquillaje fluido, compacto, correctores, gloss, etc… deberías limpiarla todos los días.
- Para lavarla, pon un poquito de un jabón suave en la palma de la mano, y desliza la brocha. Ve aclarándola bajo el chorro del grifo, con agua fría, y con las cerdas SIEMPRE APUNTANDO HACIA ABAJO. Repite la operación hasta que el agua salga completamente limpia.
- Una vez limpia, escurre el exceso de agua y déjala secar en posición horizontal, sobre una encimera, apoyando únicamente el mango y dejando las cerdas fuera de la superficie, de modo que queden completamente libres.
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Descripción del producto
Esta brocha en ángulo se ha diseñado especialmente para que sea tu aliada al aplicar productos en polvo en tus mejillas, ya que por su forma se adapta perfectamente a ellas. Úsala para aplicar el bronceador o el colorete, desde los acabados más intensos a los más suaves, ella te ayudará para que el proceso sea sencillo y el resultado, el perfecto.
Todas las brochas de HIRO se realizan en Alemania con fibras veganas ultra-suaves de la máxima calidad.
Medidas: 18 cm x 3,4 cm
¿Cómo usarla?
Para el colorete:
- Coge el colorete con la brocha, elimina el exceso de pigmento dándola un golpecito y aplícalo en el rostro, desde “las manzanas” de las mejillas hacia las sienes.
Para el bronceador:
- Coge el bronceador con la brocha, elimina el exceso de pigmento dándola un golpecito y aplícalo en el rostro, en las zonas donde normalmente incide el sol.
Cuidado y mantenimiento
- Una correcta higiene de las brochas te ayudará a mantenerlas intactas durante mucho tiempo. La frecuencia de lavado dependerá, lógicamente, del uso que le des. Si la usas a diario, al menos deberías lavarla una vez a la semana, o cada diez días, pues las brochas pueden acumular suciedad y bacterias que extendemos por el rostro si no cuidamos su limpieza. Si se trata de una brocha para productos líquidos, como maquillaje fluido, compacto, correctores, gloss, etc… deberías limpiarla todos los días.
- Para lavarla, pon un poquito de un jabón suave en la palma de la mano, y desliza la brocha. Ve aclarándola bajo el chorro del grifo, con agua fría, y con las cerdas SIEMPRE APUNTANDO HACIA ABAJO. Repite la operación hasta que el agua salga completamente limpia.
- Una vez limpia, escurre el exceso de agua y déjala secar en posición horizontal, sobre una encimera, apoyando únicamente el mango y dejando las cerdas fuera de la superficie, de modo que queden completamente libres.
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