Butterbalm

Descripción

Tener los labios secos no tiene por qué ser sinónimo de estar cada 15 minutos aplicándote el cacao. Un buen bálsamo nutre e hidrata en profundidad al tiempo que crea una capa protectora en la superficie. Es el caso de los Butterbalm de Savon Stories. Su fórmula ultra concentrada con escualeno, manteca de karité y aceites de ricino, oliva y cáñamo, nutren y reparan los labios, mientras que la cera vegetal de candelilla forma una capa en la superficie que los protege del exterior.

Su poder reside en sus ingredientes 100% de origen vegetal

• La manteca de karité está muy indicada para labios secos y castigados, gracias a sus propiedades hidratantes, nutritivas y regeneradoras.
• El aceite de ricino es rico en vitamina E y ácidos grasos, penetra profundamente en la piel, estimulando la producción de colágeno y elastina, suavizando e hidratando la piel.
• El aceite de oliva es un excelente emoliente y humectante de la piel, rico en vitamina E, polifenoles, ácidos grasos (oleico, linoleico) y escualeno.
• El escualano se encuentra de forma natural en el sebo de nuestra piel. De origen vegetal, y debido a su similitud con él, es un ingrediente que se absorbe muy bien por la piel. Su textura es ligera y sedosa y no obstruye los poros. Además favorece la renovación celular y protege la piel de los efectos nocivos de los rayos UV.

Un imprescindible para labios que se secan y se agrietan con facilidad, ideal para su cuidado diario, y que viene en envase de cartón, sin plásticos.

Están disponibles en varios deliciosos aromas, ¡elige el tuyo!

Ingredientes

¿Para quién? Forma de uso

Este bálsamo es apto para todo tipo de labios y gustará especialmente a los labios secos y agrietados.

Forma de uso:

• Abre la tapa y empuja con el dedo el bálsamo desde la parte de abajo del tubo.
• Aplica el bálsamo uniformemente sobre los labios.
• Reaplica siempre que lo necesites a lo largo del día.

Clemen-tips

• Al contener manteca de karité en gran cantidad, es normal que su textura varíe entre estaciones. Así, lo encontrarás más duro en invierno y más blando en verano.
• Tiene un aroma cítrico fresquito, pero suave.
• Habrás observado muchas veces a personas que parecen adictas a los bálsamos labiales y lo están reponiendo constantemente. Esto suele deberse a que usan un mal bálsamo de labios. Lo más seguro que es que esté hecho a base de aceites minerales derivados del petróleo (Petrolatum, Pariffinum Liquidum, Vaselina…). Es cierto que crean una capa protectora, pero son inertes, no tienen ninguna propiedad para la piel (nada de vitaminas, antioxidantes o lípidos), pero si no van acompañados de ingredientes que hagan algo por los labios, en el momento en el que desaparezca al comérselo, habrá dejado de hacer su función y obligará a reponerse el bálsamo de nuevo.
• Hablando de comérselo… este es otro problema. Comerse aceites minerales que derivan del petróleo no parece una buena idea. Por eso al usar bálsamos con aceites y ceras vegetales nos olvidamos de este problema.
• Además de hidratar siempre los labios, no te olvides de exfoliarlos para mantenerlos en buen estado. Si además te los maquillas, ayudará también a que el color de tu labial favorito quede mejor y dure más tiempo.
• ¿Tienes los labios muy secos y enseguida te salen pellejitos? En ese caso, no dejes de echar un vistazo a la Lip Mask de Henné, mano de santo para acabar con ellos durante la noche.
• Si por la noche duermes con la boca abierta, es muy habitual que se te resequen los labios mucho más de lo normal. Aplica un bálsamo labial que te haga una buena capa protectora, como éste, y verás cómo te levantas con mejor sensación.
• Es un envase de cartón sencillo, funciona empujando con el dedo el tubo desde la parte de abajo. Quizás notes que al hacer un poquito de fuerza sobre los labios para aplicarlo, el producto se vaya hacia abajo, pero tiene fácil y obvia solución: sujeta con el dedo la parte de abajo y se mantendrá en su sitio.