¿Te pican los ojos cuando llevas horas maquillada? ¿Se te enrojecen? ¿Los sientes pesados e hinchados? Son síntomas de que en tu caso, una máscara de pestañas orgánica no es una elección sino algo que debe probarse sin duda alguna. Si no es tu caso, te damos otros motivos para hacer el cambio: la necesidad también está ahí y es para con la sostenibilidad del planeta, y el que probablemente sea el decisivo: disfrutar de ceras y aceites vegetales como el de ricino que, además de maquillarlas, las nutren y las mantienen fuertes y bonitas.